Por lo general bien, sin tanta gente de lujo. Lo malo: el teatro, que primero dicen que sí puede entrar y de repente en lo que estoy en el público veo que sale enojadísima. Por qué no la pelaron!!
De los lugares más lindos para comer; donde vayas siempre hay algo bueno. Gente amable y ambiente relajado.
La parte de King Kong muy buena. El mejor lugar es el carrito central, ahí ves toda la acción.
Buenos juegos con mezcla de animación 3D. Vale la pena sacar el Front of line para subirte a todo sin hacer colas bajo el sol.
Bonito hotel y lo mejor su ubicación. Agradable para caminar a las zonas turísticas y para tomar el camión de los recorridos.
¡Qué puede uno decir de Disneyland!Hermoso; eso sí la noche de halloween súper simplona, pensé que habría personajes vestidos por la ocasión.
Hotel sencillo, limpio y funcional si lo que quieres es llegar a dormir solamente. Buen precio e incluye desayuno. Además, frente al hotel sale transporte que te lleva directo al Disneyland
Si la idea es ir a que los niños es un excelente lugar. Si lo que buscas es una rica comida, esta no es la opción. Es mejor comer en la plaza y después ir a jugar o viceversa.
Lindo lugar para correr, pero deberían poner bancas con mesa (esas que hace Ciel de Pet) para los que van a comer ahí. Una opción es los pasillos centrales.
Si de pan se trata este es uno de mis lugares favoritos y más si lo combinas con chocolate caliente. Los favoritos: chocolatín, concha vainilla, bisquet y el de canela.También las malteadas son ricas.
Decoración buena, atención amable pero lo mejor fue la sopa de Milpa y el pollo plaza Morelia. Uff deliciosos. Eso sí, si no comes chile el pollo pica leve pero sabroso. La cecina también muy rica,
Si de antojo de pan traes, Rosetta es el lugar. Los chocolatines y roles de canela son deliciosos.
Juegos divertido aunque creo que el área infantil la deberían de agrandar. Me parece que son los mismos juegos a los que me subía de niña.
Siempre y digo siempre es una delicia venir a comer aquí. La picanha es mi favorita junto con el pan de queso, acompañada de limonada brasileña y de postre la papaya con licor de cassis.
