Un camino lleno de colores y recuerdos. Tan querido por los queretanos, que la primer respuesta para quien busque un souvenir o artículo tradicional, siempre serán los negocios del Andador Libertad.
Los fanáticos de la adrenalina y los gritos encuentran su santuario en La Arena Querétaro, espacio testigo de la euforia y golpes entre rudos, técnicos y sus respectivas aficiones.
En una casona antigua encuentra su hogar, la compañía de teatro universitario más antigua de Latinoamérica, famosa por ofrecer siempre un gran espectáculo que todo público puede disfrutar.
No hay nada más atractivo que disfrutan de bailar y darse una vuelta un jueves o domingo por la noche al Jardín Zenea y ser parte del espectáculo nocturno que ofrecen los amantes del danzón.
Los queretanos saben que “un taco que cierra no es taco” gracias a las enseñanzas del querido Don Chamorro. Por eso es aquí en donde no da pena echarse un buen taco de chamorro en el desayuno.
El Mesón de Chucho el Roto, uno de los restaurantes que con su tradición y sabor, mantienen vivo al corazón del centro histórico.
En este puesto callejero de la tradicional botana mexicana, quien te atiende siempre te saludará con la frase distintiva “¿Cómo le va hermano(a)?”.
En una pequeña plaza a un costado del templo “La Congregación” está la esquina del antojo: buñuelos, elotes, jarritos y demás cruzan aquí sus caminos.
El puesto más visitado del mercado de La Cruz, es sin duda el de El Güero y Lupita, gorditas de maíz quebrado que conquistan los paladares de quien los visita.
Lo más famoso de la esquina de La Congregación son, los Hot Dogs, ampliamente conocidos y reconocidos como los favoritos para ofrecer en los eventos y fiestas de cualquier queretano.
No hay mejor lugar que esta cafetería de los años 40. El helado de guamiche, la malteada de vainilla, el mantecado, la rosca de piña y las enchiladas de La Mariposa, son antojos recurrentes
Los aparadores más llenos de colores y sabores están en esta típica dulcería queretana. Con más de 600 tipos de dulces.
Uno de los lugares con la mejor vista de la ciudad, y el favorito para “tomar un respiro” y ¿por qué no? una “selfie” al mismo tiempo que observas la belleza de la ciudad de Querétaro.
Los preparados de nieve de limón con vino tinto y helado de mantecado con Coca Cola, son una delicia en una tarde de verano en el centro. Por eso los queretanos adoran visitar la Nevería Galy.
Piñatas Sqooby, las piñatas de los arcos. Este popular negocio ofrece una gran variedad de piñatas hechas de forma completamente artesanal.
Si tu intención es dedicar una canción desde el corazón, “La Plaza Santa Cecilia” es el lugar, donde todo queretano sabe que tiene que ir para contratar un mariachi o para explayarse y cantar ahí.
Restaurante en donde el folklore nacional se vuelve parte del lugar, de sus sabores típicos y su ornamentación mexicana casual llena de elementos y murales.
Testigo de abrazos, chismes, negocios y celebraciones es esta clásica cantina queretana en donde hombres y mujeres se reúnen para cerrar negocios y olvidarse de sus problemas en el exterior.
Tortillas hechas a mano, variedad de guisos y una buena agua de horchata o lima se disfrutan en una de las taquerías más antiguas de Querétaro.
La leyenda de un árbol de cruces y la danza de los concheros en el mes de septiembre, son íconos del Templo de La Cruz. Un imperdible para cualquiera que visite la capital queretana.
Escondida al fondo de la casa, “Doña Juanita” reúne a quienes la visitan en busca del sazón y calidez de hogar para disfrutar de unas típicas enchiladas, huevos rancheros o mole de olla.
